martes, 19 de enero de 2010

Ayer

Publicado el 04/06/09

No desesperes,
pues todos los mamíferos mudamos el pelaje.
La noche cae, y vuelve a amanecer,
una, y otra, y otra vez.
Es absurdo pensar que caerá una gota de lluvia
donde hace eones cayó otra,
regando todos los átomos
que bebieron antaño de su precursora...
improbable más bien, no imposible.
Es de estúpidos pensar que los cachorros
no crecen,
que los manantiales nunca se secarán,
que la luz de la luna será tan brillante
como cuando la contemplabamos acompañados.
La paz del alma,
¿en serio queremos eso?
Me gusta navegar por aguas turbulentas
si eso significa recordar que antaño asi descubrí un paraiso.
Deberiamos de dejar de matarnos lentamente,
ah, pero que gran perdida.
Un día de estos, cuando mi nombre te traiga
olor a melancólica sonrisa,
cuando no te afecte más que para murmurar entre dientes:
"fueron buenos tiempos",
llamame para tomar café.


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